Colegios Mayores Universitarios, motores sociales ante los retos del futuro
Más ancianos que niños; más obesos que gente que pasa hambre; mujeres más ricas que hombres; 35 ciudades de más de 20 millones de habitantes; empresas más poderosas que estados; tecnología que cambia radicalmente sectores y pone en entredicho derechos fundamentales; inteligencia artificial que rediseña sectores y actividades; aumento de la desigualdad; competencia en capacidades e intangibles más que en recursos físicos; cambio climático y graves problemas medioambientales… Estas son algunas de las predicciones que hacen lo expertos en sus proyecciones del mundo para los próximos 15-20 años. ¿Y qué lugar ocupará la Universidad y los Colegios Mayores Universitarios en concreto en este escenario?
Para dar respuesta a esta pregunta, más de 170 participantes provenientes de colegios mayores universitarios de toda España se han dado cita en la Universidad de Santiago en la 43ª. edición de las Jornadas de los Colegios Mayores Universitarios. Colegiales, miembros de los equipos directivos y expertos en distintas disciplinas han participado en seminarios y conferencias, pero también en mesas de trabajo conjuntas para reflexionar sobre “Metatendencias, Universidad y Colegios Mayores: una ruta para 2050”, convirtiendo durante unos días a la ciudad de Santiago en un laboratorio de ideas sobre el futuro de la educación superior.
Porque, tal y como recogía el presidente del Consejo de Colegios Mayores Universitarios, D. Juan Muñoz, en su discurso del acto de clausura: “O somos capaces de adaptarnos […] o vamos a tener grandes dificultades para cumplir con nuestra misión, que es servir a la sociedad”. Y así lo señalaba también el Vicerrector de Estudiante de la Universidad de Santiago, D. Víctor Arce Vázquez: “Los colegios mayores no son ajenos a estos cambios, sino que deben ser motor de las transformaciones económicas y sociales. Servir para que, como parte de la Universidad que son, nos ayuden a adaptarnos”. ¿Y cuáles son los retos que tenemos por delante?
“O somos capaces de adaptarnos […] o vamos a tener grandes dificultades para cumplir con nuestra misión, que es servir a la sociedad”.
Frente a los retos del futuro, #YoSoyColegial
Si, como recogió Pablo Simón, encargado de la conferencia sobre metatendencias sociales, “el motor de la existencia social es el tiempo y la aspiración para mejorar, no el punto de partida», “¿cómo podemos ser motores sociales para ayudar a reducir esa desigualdad?”, planteaba Juan Muñoz.
Si, como relataba el ponente José Moisés Martín Carretero en su exposición sobre metatendencias económicas, «el perfil de persona con mayor riesgo de pobreza es el de los jóvenes, sus estudiantes […], los menores de 35 años, particularmente los poco cualificados» y que “la brecha educativa se ha disparado con la pandemia”, “¿cómo podemos hacer para que nos lleguen de verdad alumnos de toda condición económica?».
Si, como explicaba Marta García Aller durante su intervención acerca de las metatendencias tecnológicas, nuestras capacidades y comportamientos se ven afectados por las tecnologías, “¿cómo podemos adaptar la vida universitaria que ofrecemos –24 horas al día y 7 días a la semana– a este nuevo contexto?”.
Esa fue precisamente la esencia de estas jornadas, tres conferencias y mesas de trabajo en las que se han abordado esos tres ámbitos principalmente, y para las que las aportaciones de los jóvenes universitarios y universitarias han resultado clave: “Las jornadas debían servir para reflexionar sobre los retos y oportunidades que presentan los numerosos cambios que se están registrando en el entorno educativo y universitario, y que la pandemia ha puesto sobre la mesa de forma acelerada”, explicaba Juan Muñoz. “Son muchas las incógnitas que se dibujan en los próximos 30 años y junto a nuestros colegiales, deseamos identificar las herramientas que nos ayudarán a adaptarnos mejor y poder seguir cumpliendo nuestra función como entidades formativas complementarias a la Universidad”, concluía.
Apoyo al modelo de Colegio Mayor Universitario
Tanto las autoridades académicas como las de la Xunta de Galicia y el Consello de Santiago de Compostela, como anfitriones, destacaron la importancia que juegan los Colegios Mayores Universitarios en los retos que plantean tanto el presente como el futuro. “Estas jornadas resultan cruciales en una época de cambios aceleradísimos y en la que la reflexión que se va a desarrollar a lo largo de esta semana contribuirá a que brille la sociedad a la que nos debemos”, apuntaba el Rector Magnífico de la Universidad de Santiago de Compostela, D. Antonio López Díaz.
Sin olvidar –recordaba el Presidente del Parlamento, D. Miguel Ángel Santalices Vieir– que «precisamos que la formación académica aspire siempre a la excelencia, pero necesitamos también formar a personas íntegras, con espíritu crítico, solidarias y compasivas […]». «[…] Cuestión, esta última, de imposible materialización sin ustedes y las familias»
Y por todo ello se presentó la Declaración de Santiago, un documento al que se han adherido 24 universidades, tanto públicas como privadas, y que expone el valor que los Colegios Mayores Universitarios proporcionan a la comunidad universitaria.
“Somos instituciones universitarias que llevamos mucho tiempo (en ocasiones siglos) prestando servicio a nuestros campus, que atraemos talento y proporcionamos formación extracurricular a los colegiales, favoreciendo su movilidad nacional e internacional, promoviendo valores ciudadanos y de convivencia y estimulando la vida cultural universitaria, etc.”, resumía el presidente de la asociación.
Tras su lectura, el rector ha reconocido que “era muy difícil no adherirse a esta propuesta», para a continuación añadir: “Hay pocas universidades que como la USC tengan una relación tan directa con el fenómeno colegial desde sus orígenes hasta nuestros días”. Y esta cuestión la ligaba el Vicerrector de Estudiante de la Universidad de Santiago, D. Víctor Arce Vázquez, con que “los Colegios Mayores Universitarios son una herramienta para salvar esas desigualdades sociales”.
“Los Colegios Mayores Universitarios son una herramienta para salvar esas desigualdades sociales”.
“En Santiago de Compostela, entre plazas propias y adscritos, tenemos un porcentaje de habitaciones que permiten que muchas personas que probablemente no serían capaces de acceder a la Universidad lo hagan. Hay una clara labor social que llevan a cabo los colegios mayores”, concluía.